EL RECLAMO DE OSCAR

  



En los tiempos en los que apareció el caballero negro, Oscar se percató de un cambio en el comportamiento de André, el cual por ese entonces salía por las noches "a cabalgar", cosa que nunca antes había hecho y ella notaba que algo le ocultaba. No era difícil darse cuenta de que aquel hombre al que conocía desde su infancia no le estaba diciendo toda la verdad con respecto a esas salidas nocturnas.
Es muy probable que para respetar su privacidad Oscar haya preferido no insistir en preguntar acerca de sus verdaderas actividades, sin embargo, al aparecer el Caballero Negro y al sospechar - por las características de éste - que podría tratarse de André, a Oscar no le había quedado otra opción que encararlo para que le diga la verdad.

Para evitar malos entendidos, André decidió llevarla a visitar los lugares que frecuentaba por las noches: sacerdotes, nobles, profesionales y gente común se reunían para debatir acerca de lo que sería la Nueva Era y durante esas noches, André escuchaba atentamente sus posiciones en relación al futuro de Francia. A Oscar le resultó inquietante que este tipo de reuniones que conspiraban para abolir la monarquía se estén llevando a cabo en París, y aunque sabía que Francia atravesaba graves problemas, ella no se había dado cuenta de que la revolución ya se venía gestando en aquellas iglesias a las que André iba con la curiosidad de una ser humano que - siendo culto e instruido como él - vivía entre ambos mundos.

En el camino de regreso a la mansión Jarjayes, André le iba a explicando a Oscar sus razones para ir a este tipo de reuniones, razones en las que ella no se había detenido a pensar pero que André tenía muy claras y sobre todo una en particular: André no era noble. Se había educado como tal, frecuentaba el palacio de Versalles, conocía de cerca a los reyes, iba a los bailes de los nobles y tenía una preparación igual o superior a la de cualquiera de los guardias reales pertenecientes a las familias más aristocráticas de Francia a los que Oscar comandaba, sin embargo, él era un plebeyo, era una persona que estaba al servicio de una noble y por más que Oscar no lo viera así, en la práctica y en la realidad ambos pertenecían a clases sociales distintas. En el momento en el que André le dijo "yo no soy un noble y por eso me sentí con derecho a saber como podría ser la Nueva Era" Oscar se sintió un poco traicionada y esto generó en su corazón un - casi imperceptible - resentimiento hacia él. Ese resentimiento estuvo dando vueltas en su mente durante ese regreso a la mansión y en días posteriores, pero no se lo dijo de inmediato.


A partir de aquí resulta interesante ver como ella muestra un comportamiento similar al de cualquier mujer que está molesta con su novio, aunque al ser una persona educada y de gran control emocional, lo demuestra de una manera tan sutil que es casi imperceptible. Aquí van algunos ejemplos:

Ejemplo 1: 

Cuando Oscar le dice a André: "No te forzaré a ayudarme"

Con el objetivo de capturar al Caballero Negro, tanto Oscar como André estaban participando de cada uno de los bailes que los nobles organizaban en Versalles. Sin embargo, a partir de que André le dijo que él no era noble y le dio a entender que simpatizaba con las causas del pueblo, ella comenzó a planear su estrategia de captura sin incluirlo. A André no le interesaba lo que ella planeara sin él ya que de cualquier forma buscaría la manera de ayudarla y aunque no se lo pidió - hablando solamente de la versión anime - él se intercambió con ella para representar al Caballero Negro y se embarcó con ella en la misión de capturarlo aunque en verdad no quería hacerlo.


Ejemplo 2:

Cuando ambos tienen una corta conversación sobre lo que pasará luego de capturar al Caballero Negro:
Oscar: (mirando por la ventana) "Después de resolver esto, podrás ir con tu grupo de estudio, o a donde quieras....".

André la mira algo sorprendido por sus palabras, ya que no sabía que ella tenía tan presente aquellas actividades nocturnas que lo habían distraído varias noches y en las que ella no estaba incluida, sin embargo, Oscar no había dejado de pensar en eso...

André: Hablando con franqueza Oscar, la Nueva Era no será buena para los nobles...

Y sin dejar de darle la espalda, ella le responde de inmediato: 

Oscar: Al menos no tendrás que preocuparte, después de todo, tú no eres noble.

 Esta última frase definitivamente fue un reclamo hacia André. Para ella, su amigo de la infancia había marcado distancia de ella al decir que él no era un noble a pesar de que había crecido como tal, dándole a entender que se sentía distinto a ella. A Oscar esto le había parecido bastante injusto ya que ella siempre lo había tratado como a un igual y en su mente y corazón entre los dos no había ninguna diferencia.


No me imagino a Oscar haciéndole este tipo de reclamos a Fersen - a quien en ese momento creía amar -, ni a Rosalie, quien días antes le había dicho directamente que odiaba a los nobles. Sin embargo, en este caso se trataba de André, la única persona a quien ella le compartía sus preocupaciones, con quien se aventuraba a todas sus misiones, a quien siempre recurría cuando necesitaba apoyo, quien había compartido con ella los momentos más difíciles de su vida, la persona en la que más confiaba. Si a alguien consideraba Oscar como a un igual, era a André.

De inmediato, André se dio cuenta de su reclamo y se molestó con ella ya que Oscar no había comprendido sus verdaderas intenciones: "¿Cómo puedes decir eso Oscar?... ¿Crees que solo trato de saber de la Nueva Era para mi beneficio?... ¿Acaso crees que te abandonaría?.... Oscar, también lo hago por tí..." - pensó él.
Ella no comprendía sus sentimientos: Como todo hombre que ama a una mujer, Oscar estaba incluida y considerada en cada una de sus acciones y decisiones.
Habían varias razones por las que André se tomaba el tiempo de ir a esas reuniones: la primera era para saber como la Nueva Era afectaría a Oscar y a su familia, la segunda era porque le preocupaban y dolían las injusticias que se cometían contra el pueblo, pero la tercera razón y la más importante de todas, era por el íntimo deseo que tenía de pasar el resto de su vida con Oscar sin que las diferencias de clases sociales se los impidieran. Para ese momento, André tenía la certeza de que no existía otro hombre sobre la faz de la tierra capaz de amarla tanto como él la amaba, y sabía que el nacimiento de una Nueva Era le permitiría la oportunidad de estar con ella para siempre.


Si bien Oscar pensó por un momento que André no estaba considerándola cuando iba a las reuniones que conspiraban contra la monarquía, él siempre le demostró con acciones que siempre pensaba en ella y que la apoyaba incondicionalmente, y el mejor ejemplo de esto es cuando - en fechas previas al estallido de la revolución - Bernard le ofrece trabajar con él en la lucha del pueblo, lo cual es rechazado por André, ya que sabía que Oscar aún no estaba lista para abandonarlo todo ni para traicionar a los reyes a pesar de que la causa fuese justa. André se mantuvo leal a ella y permaneció a su lado por encima de sus propios deseos de un mejor futuro para sus compatriotas. 


Review basado en el capítulo 26 de la Rosa de Versalles. Créditos de los dialogos y las imagenes al anime La rosa de Versalles.



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